Aunque tengo varias ideas para escribir bullendo en mi cabeza (que van desde mis primeros pasos en el arte de la danza hasta un exhaustivo análisis de un supuesto invento supuestamente revolucionario para cualquier mujer supuestamente moderna), me decantaré por unir aquello en lo que me licencié con aquello que mejor sé hacer. Lo primero es el Periodismo; lo segundo, la crítica feroz y dañina.
La mezcla de estos dos polos, no tan opuestos como deberían serlo, estaba en la mesa de la cocina cuando llegué a casa. Al principio, mientras me preparaba la comida, ni siquiera me di cuenta de que estaba allí. Más tarde, cuando terminé de fregar los cacharros y fui a echar mano del trapo de cocina, lo vi. Pensé que era alguno de los diarios gratuitos que coge mi hermana cuando va a la universidad en Metro. Pero no. En realidad era ese periódico que siempre acabo hojeando y comentando, aunque por razones muy distintas a las que podéis estar pensando. Me refiero a El Informativo de Moratalaz.
El periódico mensual gratuito de mi barrio (perdón, de mi distrito) es digno de una tesis doctoral. Como no sé por dónde cogerlo, empezaré por la maquetación, por ejemplo. ¿Qué pensaríais de un diario escrito en Comic Sans? Exactamente: no se puede porque es impensable. Gracias a San Times New Roman, El Informativo de Moratalaz ha evolucionado (ligeramente) con el tiempo y ya es topográficamente aceptable. No sé si hablar de que no cada página tiene un número y ancho distinto de columnas, sin guardar una proporción entre unas y otras. Tampoco sé si mencionar que el tamaño de letra de los textos cambia sin previo aviso de una noticia a otra. Llegados a este punto, prefiero dejar este tema, pues sé que más de una ya estará cortándose las venas con la pantonera.
Desde el punto de vista de la redacción, no tengo palabras. Los párrafos de veinte líneas formados por una única oración son la marca de la casa. El marcado carácter subjetivo de las noticias (teóricamente objetivas por definición) se ve claramente en los halagos excesivamente empalagosos de muchos de sus textos. Y los titulares ya son punto y aparte: “Correos: algo más que enviar y recibir correspondencia”, “Lo que el béisbol se llevó”, “Todo sobre la diabetes”,… Vamos, que los publi-reportajes están mejor redactados que muchos de los otros géneros periodísticos del periódico.
Podría seguir así durante párrafos y párrafos, pero no soy tan mala. Siempre he defendido la importancia del periodismo local y creo que esta publicación aporta su granito de arena en este sentido. Además, cuenta con un gran apoyo por parte de los lectores, que envían una buena parte de los textos que se publican. Desde un abuelo que escribe en verso (apodado cariñosamente ‘el poeta de Moratalaz), hasta un buen número de colaboradores que apuesto que trabajan gratis.
Al final me he ablandado en mi feroz crítica. Será porque mis amigas del barrio (perdón, de la universidad, del trabajo y de la vida) comenzamos en el mundo del Periodismo en este humilde medio. Así que no voy a dar la mano que nos dio de comer. Espera, espera… No nos dio de comer. ¡Trabajábamos gratis! Maldito Periodismo…
Me he desmayado en el párrafo sobre la maquetación y no he sido capaz de seguir leyendo el post.
ResponderEliminar¡Oooooooooooohhhhh! Y qué decir de esos colores tan bien combinados, o esa cabecera en Word Art... ¡Entrañable!
ResponderEliminarY que encima no da para comeeeer!!! GRRRR
ResponderEliminarCreo que al director sí le daba para comer (eso lo pueden confirmar mis compañeras de fatigas, que empezaron unos meses antes que yo). Pero nosotras no vimos ni medio céntimo :-(
ResponderEliminarYo me desmayo también en el párrafo maquetil, pero me espabilo y sigo leyendo. Por dios, hacedle una foto, que yo quiero verlo
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarSoy un amigo de César, ¿qué tal?
Hace unos días vi en su blog de cine el enlace al tuyo y lo seguí y desde entonces me lo he leído enterito. Me gusta mucho cómo escribes, tienes un estilo bastante personal y ameno, y en muchas de las entradas encuentro cosas con las que me siento muy identificado.
Así que nada, por mi parte muchísimas gracias por los buenos ratos que he pasado leyéndote y a ver si podemos seguir disfrutándote mucho tiempo.
Un saludete
@Patricia Vera: Puedes verlo en el segundo enlace del texto. No me responsabilizo de las consecuencias...
ResponderEliminar@Goldman: Hola, Goldman. Muchas gracias por tus palabras (es difícil expresar por aquí lo rojas que se han puesto mis mejillas al leer un comentario tan positivo). Me pasaré por tu blog :-)
Que no se pongan rojas tus mejillas ante la verdad ;)
ResponderEliminarBienvenida a mi blog si te apetece pasarte, aunque últimamente lo tengo abandonado por exceso de "trabajo"; a ver si actualizo pronto. Y si no pues nada, gracias por tu visita si me visitas
Bye ;)